Redes sociales
En Michoacán, el programa de Farmacias del Sombrero sigue expandiéndose como parte del legado del ahora fallecido alcalde Carlos Manzo, quien abrió seis de estos espacios gratuitos para acercar medicinas y atención básica de salud a comunidades con dificultades de acceso. Ahora, bajo el liderazgo de su viuda, Grecia Quiroz, se inauguró la primera farmacia de este tipo fuera de Uruapan, en la comunidad de San Andrés Coru, consolidando la presencia del proyecto más allá de la cabecera municipal.
Estas farmacias ofrecen medicamentos básicos sin costo, atención primaria con apoyo de enfermeras y médicos, así como orientación preventiva, una fórmula que conecta con las necesidades de muchos ciudadanos que enfrentan fallas persistentes en el abasto de medicinas públicas.
Las Farmacias del Sombrero parecen ser parte de la construcción del Movimiento del Sombrero como alternativa política, una que da respuesta a los problemas que los gobiernos federal y estatal no han logrado. Es decir, los servicios de salud y el abasto de medicamentos, dos fallas persistentes que han atravesado los dos sexenios de Morena. Éste fue también el caso con la seguridad pública, principal prioridad de Carlos Manzo, quien denunciaba sistemáticamente los fallos de la política de seguridad diseñada desde Palacio Nacional y ejecutada en coordinación con el gobierno de Michoacán.
Además de la estrategia de concentrarse en áreas cruciales para la ciudadanía y que la 4T no ha podido resolver, el movimiento también tiene símbolos y figuras claras. Carlos Manzo, asesinado durante un evento público, se ha convertido en un referente trágico de la lucha contra la violencia. Su esposa, Grecia Quiroz, ha asumido esa narrativa como líder visible del movimiento.
El Sombrero comienza ya a construirse simbólicamente como una alternativa de valentía ante la inacción de los gobiernos de Morena. Con acciones como las farmacias, el Movimiento del Sombrero sigue construyéndose tras el auge que tuvo en las semanas que siguieron al asesinato de Manzo. Veremos si logran consolidarse como una alternativa de oposición en un Michoacán azotado durante décadas por el crimen organizado, servicios deficientes y falta de oportunidades.
