La alarmante redada en una planta de Hyundai en Georgia, donde fueron detenidos 23 mexicanos, señala, de nuevo, la fragilidad de nuestra red consular en Estados Unidos. Claudia Sheinbaum aseguró que “no van a faltar recursos” y que los consulados están listos para brindar apoyo legal y consular necesario.
Sin embargo, datos recientes en un reportaje de El País muestran la realidad. El presupuesto de los consulados se redujo en 6% con respecto al año anterior y es 38% menor que el de 2018; hay programas de apoyo que han sido cancelados por falta de recursos; no hay personal suficiente, con 17% de los puestos vacantes, y hay personal que vive al límite de la pobreza.
La redada en Georgia sucede unos días después del encuentro entre Sheinbaum y el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, donde, esencialmente, se firmó un nuevo acuerdo de cooperación en seguridad.
¿Los acuerdos con Rubio se limitaron a un convenio aún difuso en materia de seguridad? ¿Hizo Sheinbaum alguna exigencia para que el gobierno estadounidense respete los derechos humanos de los migrantes mexicanos? La nueva redada masiva sugiere que no. Así como no hay recursos financieros y humanos suficientes para la atención consular, tampoco parece haber defensa política y diplomática.